VAPOR - BAÑO TURCO

El baño de vapor, también llamado "baño turco", forma parte de la antigua tradición de los baños purificadores de los cuales también deriva el sauna. En un ámbito donde el contenido de agua presente en el aire se condensa sobre la piel  y aporta calor al cuerpo. Es una gran terapia que aporta profundo bienestar.

La acciones simultáneas del vapor y el calor controlados, favorecen la circulación sanguínea y linfática  generando una respuesta de eliminación de toxinas. 

El baño de vapor o baño turco puede alcanzar el 100% de humedad a temperaturas entre los 40 y los 45º C, a diferencia del sauna seco que tiene un mínimo de humedad (15-20%) y temperaturas de hasta 80 grados centígrados.

TECNOLOGÍA DEL BAÑO TURCO

  • Caldera de vapor en acero inoxidable con temperatura ambiente máxima de 55º C.
  • Totalmente automatizada.
  • Sistema y proceso de vaciado y enjuague automático con atemperado de apagado.
  • Capacidades de 3 Kw. a 12 Kw. acordes al espacio de cabina o sala.
  • Comando digital electrónico con display.
  • Activación por contactor trifásico.
  • Programación de temperatura ambiente y encendido de luces.
  • Dispenser de vapor apto para hierbas aromáticas y medicinales.

Ahorro energético: El vapor comienza a formarse a 5 minutos de encendido el equipo.
Planos pre instalación.
Instalación y puesta en marcha.

BENEFICIOS Y ACCIONES BIOLÓGICAS

  • Relaja los músculos.
  • Hidrata y purifica la piel.
  • Estimula la circulación sanguínea.
  • Reactiva el sistema linfático.
  • Equilibra el metabolismo.
  • Previene los trastornos de las vías respiratorias.
  • Disminuye los tiempos de catarros, resfríos y gripes.
  • Mejora las funciones en cuadros asmáticos.
  • Acompaña a los tratamientos de la celulitis.
  • Colabora en la prevención de arrugas.
  • Alivia dolores reumáticos.

• PLANOS DE INSTALACIÓN

• PUESTA EN MARCHA